Ecuador pierde una generación: el retiro de las mesatenistas

Articulo de febrero del diario El Telegrafo de Ecuador donde da la noticia de la deserción del tenis de mesa de las mejores mesatenistas infantiles de Ecuador. Motivo por el cual no se presentó Ecuador con su mejor plantel en dicha categoria en el sudamericano de Chiclayo. Ecuador fue eliminado tempranamente. Cabe señalar por ejemplo que la actual campeona sudamericana pre-infantl Denisse Cordova le llego a ganar en sus ultimos enfrentamientos a Francesca Vargas, nuestra mejor representante dela categoria. Daniela Camino fue semifinalista del open del Juan 23 este año.
Cabria una reflexión sobre el caso de los retiros de nuestros deportistas en nuestro país.
Aqui el articulo titulado "No hay sexo débil para el tenis de mesa"



Un momento de esparcimiento. De izq. a der: Joselyn Peralta, Eunice Gálvez, Pierina Puga, Tania Almendáriz y Luisa Fernandez.


La mayoría de chicas se retira a mitad del camino, pero hay otras que apuntan alto en este deporte.

En el coliseo del Centro de Alto Rendimiento de tenis de mesa en Guayaquil se observan alrededor de 36 deportistas que entrenan arduamente y se alistan para las próximas competiciones.

Son jóvenes -varones- de entre 11 y 18 años, la mayoría, que llegan a la 10:00 y 17:00 para integrarse a los entrenamientos bajo el mando del profesor Paúl Bermeo y la atenta mirada del asesor técnico sueco, Ian Marshall.

Una práctica a doble jornada estableció la Federación Ecuatoriana de Tenis de Mesa (FETM) para elevar el nivel de los deportistas en este nuevo período. El método de entrenamiento no se fija si son niños o niñas. No hay sexo débil para el tenis de mesa.

Para Jeanine Cuadros, presidenta de la institución nacional, “el futuro del tenis de mesa está como viento en popa” tras agregar que “2010 será el año para Ecuador en este deporte”.

El nuevo proyecto que incluye el desarrollo de esta disciplina, también, cuenta con el propósito de elevar el nivel de los competidores.

Pero hay quienes se unen a este proyecto para hacer realidad sus sueños y otros que en medio camino se resignan a no seguir creciendo.

De ahí parte un grupo de luchadoras -damas- que se pone los colores de su provincia para participar en los Grand Prix que organiza la FETM y representar al país en alguna cita internacional.

“Estoy acá con la convicción de que voy a llegar lejos. Juego tenis de mesa porque me gusta”, reconoce la manabita Pierina Puga, quien junto con su prima Nicole esperan ser las revelaciones de 2010.

Así como las manabitas se esfuerzan por dar lo mejor en cada entrenamiento. También las más experimentadas luchan por seguir creciendo.
“Todas sabemos que acá el entrenamiento es fuerte, por eso es que algunas compañeras optaron por retirarse”, cita la mejor ranqueada del país, Tania Almendariz.

Cuando la microtenista de 17 años lanzó su opinión sobre las chicas y chicos que han abandonado este deporte, a la vez el profesor Paúl Bermeo afirmaba con la cabeza.

“Es verdad, hemos tenido jugadores -en su mayoría chicas- que se han retirado este año. Pero nos confesaron que lo hacen por motivos personales”, relata Bermeo.

La campeona sudamericana Denisse Córdova fue una de las que tiró la toalla. A ella se sumaron Daniela Camino y María Barcos. Microtenistas que tuvieron un buen 2009.

En ese momento se abrió el debate y siete de las nueve integrantes que estaban en el coliseo comenzaron a dar su versión de los hechos.

“Pienso que unas se retiran porque ya no les parece interesante el tenis de mesa. Se aburren. Además que lo ven como una etapa más en su vida”, señala Pierina.

Enseguida hubo quien la reproche y diera su versión.

“Yo, más bien, creo que lo hacen por la presión de sus padres”, indica Luisa Fernández, una de las ‘mejores’ jugadoras de Guayaquil.

Pero ninguna habló de la posibilidad de que lo hacían por la intensa jornada de entrenamiento o por qué, tal vez, su novio le pedía ir al cine y no podía dejar la práctica.

Andrés Argudo
Esas interrogantes dieron hincapié para que se busque la respuesta a un problema que afronta no solo el tenis de mesa, sino tantas otras disciplinas en el país.

“No creo que sea eso. Yo, al menos, no dejaría de jugar porque me lo pida mi novio”, dijo Sofía García, al momento que sus amigas la miraban y decían: sí claro... y estallaron en risas.

En medio de las carcajadas se escuchó una voz inocente que decía: “yo no sé, pero como yo no tengo novio, no me afecta”, era Eunice Gálvez, una microtenista que a sus 12 años se concentra ciento por ciento en el deporte. Todas la miraron y se pusieron de acuerdo en que no hay motivos para dejar de entrenar.

“Eso es cierto. Todo está en el carácter de cada uno para seguir adelante y no dar un paso al costado. No importa el rigor de las prácticas”, manifiesta Joselyn Peralta, la tercera mejor microtenista del país.